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VITAL BLUE: Temporada de PEELING…..

¿Y si hablamos de cómo compensar los efectos adversos?

Comencemos por definir “peeling”. Ésta palabra significa “pelar”, en nuestra jerga es sinónimo de “exfoliar”.

Se denomina exfoliación o peelings a los procedimientos naturales, mecánicos o químicos por los cuales podemos acelerar la descamación de las células de la capa córnea, obteniendo como resultado una mayor mitosis celular en la capa basal.

Pero si hablamos específicamente de los peelings químicos, podemos decir que se trata de la aplicación de un agente químico de actividad determinada sobre la piel, para lograr una exfoliación acelerada.

Cada piel es única, con necesidades específicas; por lo tanto, es muy útil una opción de tratamiento que se pueda adecuar y personalizar a cada paciente. Esto es lo que ofrecen los peelings químicos cosmetológicos.

Con la posibilidad de exfoliar la piel a distinta profundidad, el profesional de la estética puede elegir el ácido adecuado, considerando las necesidades de cada biotipo cutáneo, los riesgos inherentes y la tolerancia de cada persona. Los ácidos se pueden trabajar de distintas maneras de acuerdo a las habilidades y pericia de los profesionales, lográndose por diversos caminos resultados satisfactorios.

Destacarse en el uso de ácidos para peelings químicos no sólo se relaciona con el conocimiento de las técnicas, sino que depende de la capacidad del profesional para diseñar el tratamiento que mejor se adecue a cada paciente.

Existen factores claves para tener en cuenta a la hora de armar el protocolo de nuestro tratamiento de peeling cosmetológico:

  • El o los ácidos a utilizar
  • La concentración de cada ácido
  • El pH de cada ácido
  • La duración de la aplicación
  • La frecuencia del tratamiento
  • Qué hacer pre y post topicación

Ahora bien, ésta práctica siempre desencadena ciertos efectos adversos, “ojo” éstos no significan problemas, sino solamente consecuencias lógicas de dicha práctica.

Efectos adversos: Como resultado de la aplicación de agentes exfoliantes, la piel:

  • Queda afinada, temporalmente pierde su función barrera y por lo tanto queda desprotegida
  • Está sometida a stress oxidativo
  • Se irrita.

Es importante compensar estos tres procesos antes que nuestro paciente abandone el gabinete. Compensar estos efectos hará que el paciente se retire del consultorio sintiéndose a gusto con su piel.

IRRITACIÓN DE LA PIEL: Involucra cambios celulares en el queratinocito, producción de mediadores proinflamatorios, cascada de citoquinas y procesos de stress oxidativo. Mecanismo no alérgico. Manifestación: prurito o escozor, enrojecimiento, leve hinchazón o edema.

¿Cómo compensamos? El tratamiento debe reducir los síntomas devenidos de la irritación, esto mediante la desactivación de los mediadores de la inflamación y enzimas implicadas en el proceso. Los activos a utilizar deberán tener propiedades descongestivas, vasoconstrictoras, calmantes y antipruriginosos.

Mencionamos algunos activos antiirritantes y descongestivos: Extracto de Arándanos, caléndula, melisa, hamamelis, té verde, manzanilla, granada, ginko biloba

Estos extractos deben estar vehiculizados en formas cosméticas livianas y frescas que favorezcan la acción de los mismos.

STRESS OXIDATIVO: Como resultado de la injuria que producen estos tratamientos es más que probable que se aumente la concentración de radicales libres en la piel, excediendo la cantidad de sustancias antioxidantes (propias de la piel) y provocando lo que se conoce como stress oxidativo. Estas especies reactivas tienen origen en la misma piel como resultado de las reacciones bioquímicas relacionadas con la inflamación.

¿Cómo compensamos? Es aconsejable aplicar después de un peeling, activos antioxidantes que frenen la oxidación provocada por los radicales libres.

Mencionamos algunos activos antioxidantes: Arándanos, vitamina E, niacinamida, betacarotenos, licopeno, coenzima Q10, uva, resveratrol, vitamina C.

PÉRDIDA DE LA FUNCIÓN BARRERA: Los peelings eliminan parcial o totalmente la barrera hidrolipídica de la piel. En condiciones normales la piel tarda 4 horas aproximadamente para recomponerla. En ese lapso, hay mucha pérdida de agua transepidérmica y la piel se deshidrata y reseca.

¿Cómo compensamos? Es fundamental humectar la piel y luego sellarla usando cosméticos que contengan lípidos similares a los que produce la piel.

HUMECTAMOS: Urea, Ácido hialurónico Colágeno, Proteínas de ADN, Lanonila, son algunos de los activos que cumplen ésta función.

SELLAMOS: Ceramidas, Lecitina, Colesterol, Aceites vegetales naturales, son algunos de los activos que cumplen ésta función.

Y por último…..

CORRECCIÓN SEGÚN BIOTIPO CUTÁNEO: Además de compensar las reacciones adversas de los peelings, podemos dedicarnos a la corrección de las distintas afecciones cutáneas. Al afinar la piel y ablandar la cohesión de las células de la epidermis, logramos una mayor penetración de principios activos. Es aconsejable aprovechar esta permeabilidad de la piel para efectuar las correcciones específicas para cada biotipo cutáneo. ¡¡Como ya sabemos cada biotipo cutáneo tiene necesidades diferentes para corregir, éste es un buen momento para obrar en consecuencia!!

PROTECCIÓN SOLAR: Nunca olvidar, terminar el tratamiento con protección solar y recomendar (¡insistentemente!) su uso diario.

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